El Renault ZOE ha sido un vehículo eléctrico de gran relevancia en la industria europea, atrayendo mucha atención en su momento. No obstante, en la actualidad enfrenta dificultades y se acerca a su fin de producción previsto para 2024. Esta situación resulta triste, ya que ha llevado a su práctica desaparición de los listados de ventas, especialmente en España.
En años anteriores, el ZOE ocupaba el primer puesto en ventas en España, con 2.431 unidades vendidas en 2020. Sin embargo, su popularidad ha disminuido notablemente en los años siguientes. En 2021, las ventas cayeron al tercer lugar con 1.391 unidades (-42.7%), y en 2022, el declive fue aún más pronunciado, colocándose en el puesto 19 con apenas 641 unidades (-53.8%). Durante los primeros siete meses de este año, el ZOE apenas ha logrado matricular 232 unidades en España.
¿Cuál es la razón detrás del declive del ZOE?
Existen varias razones que explican esta situación. La más obvia es el alto precio del vehículo. El ZOE en su versión más económica, el R110 con una batería de 51 kWh (395 km WLTP), tiene un costo de 36.269 euros. Además, sorprendentemente, Renault ha convertido el sistema de carga rápida en un extra, lo que suma otros 1.100 euros al precio. Por lo tanto, el precio del ZOE más económico asciende a 37.369 euros.
Este precio ha alejado al ZOE de la competencia, como el MG4 Standard, que ofrece un motor más potente (125 kW/170 CV), una batería de igual capacidad y una autonomía ligeramente menor (350 km WLTP), pero a un precio de 30.690 euros, es decir, 6.679 euros menos que el ZOE con carga rápida.
Incluso el MG4 Confort, que cuenta con una batería de 64 kWh y una autonomía de 450 km WLTP, tiene un precio de 35.190 euros antes de aplicar ayudas o promociones, lo que sigue siendo más atractivo que el ZOE.
La comparación más desalentadora se da con el Tesla Model 3, que por apenas 2.621 euros más ofrece un motor más potente (208 kW/283 CV), una batería de 57.5 kWh y una autonomía de 491 km WLTP, así como una carga rápida de 170 kW pico, Autopilot y un maletero más grande.
Además del precio, otro desafío para el ZOE ha sido la canibalización dentro de la propia gama de Renault. El Renault Megane eléctrico, por ejemplo, está disponible a un precio similar al ZOE y ofrece un diseño más moderno y un tamaño ligeramente mayor.
En la gama de entrada, el Renault Twingo representa una opción atractiva para los conductores urbanos. A pesar de tener una batería más pequeña (20 kWh) y una menor autonomía (190 km WLTP), sus 3.6 metros de largo y un sistema de carga a 22 kW lo convierten en una alternativa viable para los trayectos urbanos, y todo por un precio desde 24.501 euros, es decir, 11.768 euros menos que el ZOE sin carga rápida.
Un desafío adicional para Renault ha sido la escasez de componentes, como baterías o semiconductores, que también ha afectado a otros fabricantes. La marca francesa priorizó los elementos disponibles para el Megane y el Twingo, lo que resultó en un parón de la producción del ZOE durante tres meses, impactando en su capacidad de entrega.
En conclusión, el Renault ZOE, que alguna vez fue líder en ventas, enfrenta un panorama complicado debido a su elevado precio en comparación con opciones más competitivas, la canibalización dentro de la propia gama de Renault y la escasez de suministro de componentes. Estos factores han llevado al ZOE a encarar sus últimos meses antes de su cese de producción en 2024, dejando un vacío en el mercado que en su momento supo ocupar exitosamente.
Publicar un comentario